El 16 de febrero del año pasado, un hombre de 46 años y una mujer de 50 años bebían juntos en un café en Incheon cuando el hombre supuestamente le exigía sexo a la mujer mientras la besaba forzosamente. Como un acto de legítima defensa, la mujer se mordió la lengua para intentar detenerlo. El hombre recibió lesiones graves como resultado de la mordedura y tomó 7 semanas para sanar.
Una mujer sin nombre, que testificó en el tribunal, explicó cómo el hombre la había golpeado, la había agarrado y la había obligado. Ella ahora ha sido sentenciada a seis meses de prisión, con una sentencia suspendida de dos años por el juez principal de la 12ª Corte Penal de Incheon.
A pesar de sus afirmaciones de que sólo actuó en legítima defensa, todos los miembros del jurado decidieron que era culpable, con penas sugeridas de seis meses a un año de cárcel y hasta varios años de sentencia suspendida.
La corte alega haber tomado esta decisión teniendo en cuenta el hecho de que la mujer cometió el delito mientras ella estaba peleando contra el hombre, y consideró que el hombre es responsable del crimen.
El tribunal penal declaró que en última instancia la "víctima" había sufrido lesiones graves de la mujer y que la pareja no podía llegar a un acuerdo.
Fuente: Yonhapnews
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